Así pues, ha realizado su previsión de demanda y sabe aproximadamente cuántas reservas puede obtener en cada nivel de precios. ¿Cuál es el siguiente paso?
Hay que mirar cuántas habitaciones le quedan por vender. Un precio más bajo atraerá a un mayor número de huéspedes. Así que el precio que cobre para llenar esas 15 habitaciones tendrá que ser más atractivo. Por otro lado, si sólo necesita un huésped más, puede permitirse buscar a los reservistas más rentables cobrando una tarifa más alta.
Al elegir el precio que le proporciona el mayor beneficio (los ingresos menos los costes directos de esa reserva), usted "optimiza" sus ingresos.
¿Y qué pasa si hay un descenso general de la demanda? Los hoteles más grandes pueden hacer mayores esfuerzos de promoción para intentar atraer a los huéspedes. Pero no pueden recortar demasiado los precios, porque si lo hacen, todos lo harán. Los hoteles más pequeños, en cambio, no tienen tantas opciones de marketing. Sin embargo, tienen una gran ventaja: si recortan su precio, no todo el mundo les sigue. Así que, al recortar sus precios, pueden quitarle negocio a los hoteles más grandes, que tienen más limitadas sus opciones de precios. De este modo, puede que no haya más gente que visite la zona, pero usted puede quitarle cuota de mercado al hotel más grande mediante el uso del precio.
Por lo general, la decisión de ir a un determinado lugar de vacaciones no se ve tan afectada por unos precios ligeramente más bajos en el conjunto de la zona. Por regla general, la gente decidirá primero dónde ir y luego buscará un hotel. Por tanto, el juego en estas circunstancias es conseguir una mayor cuota de negocio. Cuando le queden más habitaciones por vender de lo habitual, deberá fijar un precio inferior al de sus competidores equivalentes para conseguir una mayor cuota de mercado. Cuando le quedan menos habitaciones, puede cobrar más y aumentar los ingresos.
Sin embargo, si se trata de uno de los hoteles más grandes de la zona, hay que tener más cuidado: hay que evitar las guerras de precios, ya que pueden perjudicar a todos.